domingo, 7 de marzo de 2010

H. P. LOVECRAFT - En las montañas de la locura, 2008 (1931).

No fue fácil encontrar este libro; al menos la edición que yo quería. Estaba la de Alianza, que no me acababa de convencer por su letra minúscula y su portada conceptual. La que me parecía atractiva, sugerente, ensoñadora, era la de Valdemar. Tengo cierta debilidad por los libros de Valdemar, he de confesarlo. En mi librería habitual –que ya ha dejado de serlo por este episodio- no me lo servían. Tardaron dos meses, dos pacientes meses, en decirme que estaba agotado. No era verdad. Me metí en la web de Valdemar. Lo tenían. Llamé a la librería que sale en pantalla y voilà. Que me pasara a recogerlo cuando quisiera. Y así fue. Una tarde fría de invierno, oscura y húmeda, mi hijo y yo atravesamos Madrid, al filo del cierre, y aparcamos bajo el hospital que hay en la calle Goya –qué sablazo nos dieron-. La librería era el propio domicilio del librero. Nos recibió la portera. “¿Ande van?”. Dimos la contraseña y tomamos el ascensor, uno de esos trastos de los años cincuenta que tiene una puerta de entrada y otra de salida. Tocamos el timbre con cierta curiosidad. Nos recibió un gato. No es mi
animal favorito, y éste se tomaba muchas confianzas. El hombre era bajito. Recibía en zapatillas de casa y con muchas ganas de hablar. Me explicó el negocio y me enseñó libros y libros. Yo escuchaba, asentía admirado, hojeaba con interés y devolvía cuidadosamente los ejemplares. Me llevé dos. Uno fue El caso de Charles Dexter Ward, y otro En las montañas de la locura.

Tenía un ansia tremenda por leer un relato largo de Lovecraft, y escudriñar otra vez a los Primigenios, a Cthuluh y compañía. La obra no defrauda, es plenamente cinematográfica, llena de tensión y espectáculo porque te lleva sin darte cuenta a esos lugares de la imaginación que emocionan. La historia es sencilla en principio, y al parecer continúa Las aventuras de Arthur Gordon Pym, de Edgar Allan Poe, que aparece citado dos veces en el texto. La verdad es que esto me hizo ver con otros ojos esta novela de Poe, que tengo guardada sin leer desde los trece años. Quizá algún día.

Lovecraft cuenta la expedición de unos científicos al Antártico, para la cual llevan un artilugio que levanta las capas terrestres con facilidad. Evidentemente, estas excavaciones permiten el descubrimiento de unos seres estrafalarios, desconocidos para cualquier biólogo, que no podían ser más que alienígenas. Lovecraft utiliza la técnica del testimonio, que quizá sea la habitual en su obra, como en La llamada de Cthulhu. Las notas y descripciones del protagonista son “reales”; es decir, muestran la evolución en las emociones y los acontecimientos, la expectación e ilusión inicial, la sorpresa posterior, el pánico consiguiente y la locura final, todo en medio de una premonición inquietante.

La descripción más clara y concienzuda de qué eran los Antiguos o Primigenios, y cuál fue su aventura en la Tierra está en esta obra. No así el propósito del culto a Cthulhu y de la amenaza para la Humanidad, que quizá esté mejor en otros textos. La expedición encuentra catorce seres no terrestres, que describe básicamente como alados y con una cabeza estrellada con tentáculos. Son los Antiguos, congelados pero no todos muertos, que vinieron del espacio exterior, sin naves, desplazándose con sus alas, para colonizar el planeta. El lugar original de su llegada fue el Antártico. Se instalaron primero bajo el mar, donde construyeron gigantescas ciudades laberínticas, ayudados por seres biológicos que crearon para ser sus esclavos: los shoggoths. Lovecraft presenta esto como una verdad anunciada, ya presente en dibujos y libros, como el Necronomicón del árabe loco Abdul Alhazred.

Los Antiguos crearon la vida en la Tierra, entre ellos al ser humano, y practicaban el arte de la escultura y de la escritura. Cazaban y criaban rebaños, comían crudo en el mar y cocinaban en suelo firme. Podían vivir en la superficie terrestre, en el mar y en las profundidades oceánicas. Se multiplicaban por esporas, igual que las plantas pteridófitas. Los jóvenes maduraban deprisa, y tenían una serie de instituciones y costumbres que les convertían en una civilización sumamente evolucionada. “El gobierno era complejo –dice-, y probablemente socialista, aunque no podía deducirse nada cierto de los relieves que vimos”. Comerciaban y tenían una moneda estrellada. Practicaban la minería, y se transportaban utilizaban bestias de carga, los shoggoths, y en tierra unos vertebrados primitivos.

El primer problema fue cuando apareció también del espacio exterior la “fabulosa prole prehumana de Cthulhu”, e inició una guerra contra los Antiguos. La paz se hizo, y los de Cthulhu se quedaron con el Pacífico y los Antiguos con el Antártico. El hundimiento de la ciudad de R’lyeh, de los de Cthulhu marcó de nuevo el dominio de los Antiguos. El segundo problema tuvo lugar cuando se revelaron los shoggoths, “entidades informes compuestas de una gelatina viscosa, y semejantes a un conglomerado de burbujas”, pero podían cambiar de forma hasta parecerse a los Antiguos. El tercer problema fue una nueva invasión, esta vez de unos “seres semifungosos, semicrustáceos (...) recordados en el Himalaya como los mi-go, o abominables hombres de las nieves”. Procedían de Plutón. Los mi-go se quedaron con las tierras nórdicas, y los Antiguos se retiraron al Antártico.

Los dos expedicionarios supervivientes descubren todo esto en su viaje a la ciudad de los Antiguos más allá de la cordillera, donde encuentran unas construcciones arquitectónicas subrealistas, monstruosas, hasta que al final alcanzan a ver a un shoggoth. Danforth, uno de los científicos, enloquece; sólo el que escribe el testimonio es capaz de mantener la cordura.

Hay claves y detalles por todo el texto, pero el capítulo VII es básico para entender toda esta cosmogonía. A mí me ha servido, sobre todo al escribirlo, para tener una estructura con la que descifrar mejor el resto de relatos de Lovecraft referidos a los mitos de Cthulhu. Después de leer unos cuantos de los diez cuentos lovecraftianos sobre este tema, aconsejo comenzar con En las montañas de la locura para adentrarse con más soltura en este universo.

13 comentarios:

  1. Hola, muy buena crítica, me han entrado muchas ganas de releer la novela, que leí hace unos años.
    Personalmente me encantan tanto "la narración de Arthur Gordon Pym", como sus 2 "continuaciones" (esta de Locevraft y "La esfinge de los hielos" de Verne). La de Verne cuenta con una edición excelente de ANAYA, bastante reciente. Pero de las 3 novelas me quedo con la de Poe (EXTRAORDINARIA NOVELA), si te animas a leerla sí que debes decantarte en este caso por la de Alianza Editorial con traducción de Julio Cortázar.
    Saludos.

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  2. Hola, rubenoki, bienvenido.

    Muchas gracias por tu comentario, que es muy interesante. No tengo la traducción de Cortázar, pero me has animado a leer las otras dos obras.

    Por cierto, se podría considerar una adaptación de la obra de Lovecraft el cuento "Who goes There?" de Campbell Jr., y la famosa adaptación "El enigma de otro mundo".

    Saludetes,

    J

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  3. Bienvenido al mundo de Lovecraft -si es que no lo conocías ya-. Durante el instituto me leí todos sus libros, fascinado por el universo que este hombre -un poco majara, por otro lado- se sacó de los rincones más oscuros de su mente. Te recomiendo "La sombra sobre Innsmouth", realmente agobiante y cinematográfico.

    Las obras de Lovecraft son, para mí, algo así como Alien, un híbrido de terror y ciencia ficción (si bien el ambiente gótico y la ausencia de elementos tecnológicos puede despistar un poco). Su influencia ha sido colosal, desde el Conan de R.E.Howard hasta el Hellboy de Mike Mignola. Alguien que no pasa de moda.

    Por cierto, en cuanto a "La narración de A.Gordon Pym", te invito a echarle un vistazo a la reseña que sobre la misma publiqué en mi blog. Una obra bastante desconcertante en mi opinión...

    Un saludo

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  4. Hola, Manuel.

    Yo también me leí todo lo de Lovecraft y compañía cuando estaba en el Instituto, pero de eso han pasado más de veinte años. Si los relees te darás cuenta de que entonces, con quince, leíste una historia distinta de la que puedas leer ahora.

    Y, efectivamente, "La sombra..." es muy cinematográfica. La he leído hace poco y sacaré una reseña de ella dentro de un mes. La influencia sobre Howard es clara, no tanto en Conan, sino en otras narraciones como "El valle del Gusano" o "La piedra negra", de las que también sacaré comentarios dentro de poco.

    Manuel, estamos leyendo o hemos leído lo mismo. Tiene gracia.

    Saludetes,

    J

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  5. Hola Jorge.

    Me uno a las recomendaciones de que leas 'La Narración...' de Poe, especialmente en su traducción por Cortázar, como no podría ser de otra manera. Una obra extrañísima, totalmente a parte del grueso de la obra de Poe (no en vano, se trata de su última novela), y que además es un experimento metanarrativo de tres pares de cojones, con el que en parte parece que Poe quiso tomar un poco el pelo a la gente.

    Y en relación con el grande autor que tratas en este post, y a la editorial que ambos admiramos, merece la pena -si no se tiene ya otros volúmenes de Lovecraft- es adquirir los dos impresionantes volúmenes "valdemarianos" de la colección Gótica, en que se recopila TODA la obra del autor.

    PD1: las portadas de los volúmenes de bolsillo de Alianza Editorial en su rama "terror" son tan impresentablemente ESPANTOSAS que es casi un insulto hacia quienes desearíamos dedicarnos a la ilustración editorial, y no nos comemos un rosco. Busca la de 'DRACULA' o la de 'DAGON', y desearás arrancarte los ojos...

    PD2: tienes en la recarga una pequeña joya que leí hace un año: 'El Agujero del Infierno'. No está nada mal.

    PD3: ¿Has visto el film independiente 'The Call Of Cthulhu' producido por la HPLovecraftSociety?

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  6. Vale,venga, en cuanto acabe a Pournelle y sus batallitas me meto con Gordon Pym y hablamos.

    En cuanto a los dos volúmenes de Valdemar tienes razón. El problema es cuando tienes casi todo en bolsillo, ya añejo, y le tienes que dedicar 50 o 60 eurazos a los dos tochos con narraciones que ya tienes. Ya. Sí. Mira, para un regalo. Je, je.

    En cuanto a las portadas de los libros, ya te dije que me gustan más las tuyas -ese estilo pulp, tío- que algunas con las que nos castigan. De todas maneras, Alianza sólo lo hace con la colección de Fantasía y Terror, porque en el resto respetan el buen gusto.

    Y sí, he visto "The call of Cthulhu". Me la bajé -que te den, Sinde- y la vi después de leer el relato -otra vez-. Es fantástica. Cómo se aferra al cuento, los actores están muy bien, la ambientación es genial, y Cthulhu es tal cual.

    Saludetes, majo.

    J

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  7. Leí ambos libros hace veinte años, todavía conservo no solo estos sino 7 u 8, uno lo tengo aqui a mi lado, lo he buscado, el de charles dexter no lo encuentro pero ligeramente lo recuerdo, recuerdo su descenso. Ambos son de lo ultimo que escribió sino recuerdo mal de su ultima etapa. dicen que la mejor si bien, yo me quedaría con mucho de lo primero escrito. Me gustaba el estilo florido mas propio de noveles que exhibió en su primeros trabajos.
    Creo que he leído todo de lovecraft, machen , derleth, dunseny, bierce, y creo que terminaron por agotarme, aun hoy no me veo releyendo a lovecraft de nuevo. Quizá enm en el futuro, o quizá es que son estas ediciones de alianza con letra enana, engorrosa y puerquilla, como yo la llamo. Muy bien escrito por ciento, casi parece un cuento.
    derleth, dunsy bierce, y creo que terminaron por agotarme, aun hoy no me veo releyendo a lovecraft

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  8. por cierto gordon pin, no me acabó de convencer. No me daba miedo, y es un tanto gore las paginas relativas al cocinero despellejando cabezas, y como que no.

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  9. Hombre, dudo mucho que la intención de Poe en Gordon Pym fuese dar miedo...

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  10. Hola, Guillermo. Tienes razón. La intención de Poe era otra. Lo leí -gracias por la recomendación-, me encantó, y publicaré pronto la reseña.
    Saludetes.

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  11. Caramba, qué envidia siento de tu rapidez lectora. ;-)

    Me alegro de que te haya gustado ese singular experimento literario de Poe. No sé qué opinarás, pero momentos como el que ven pasar el barco lleno de muertos ante los protagonistas es de esos que no se olvidan facilmente.

    Saludos.

    PD: gracias de nuevo por tus palabras sobre mis dibujos. Es cierto que esas portadas horrendas de Alianza Editorial se concentran, como ya dije, en su colección de terror. Pero tampoco pienso que se esmeren especialmente en otras colecciones... Si tomo como ejemplo algunos de los libros que tengo en mi estantería, por ejemplo, las de la "colección Stanislaw Lem" son... anodinas. Las de la "colección Kafka"... lo mismo. La de 'Moby Dick... espantosa... :-S

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  12. El extraño caso de Charles Dexter Ward, el horror de Dunwich, y sobre todo este En las montañas de la locura, sin duda mis favotitos de Lovecraft.

    Aunque ahora me parece un tiempo muy lejano, fue leer a H. P. L., entre otras cosas, lo que me animó a escribir mis primeros relatos y cuando releo los de hace años veo sus reminiscencias como si de una marca de agua se tratara.

    Saludos.

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  13. Hola, Pedro. Gracias por tu comentario. Mi favorita, por motivos personales, es "El caso de Charles Dexter Ward".

    Tienes razón: Lovecraft es un clásico que nos ha dejado huella a casi todos.

    Saludetes

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